Los colchones estrechos mejoran la relación de pareja
La afirmación anterior se basa en los beneficios que tiene dormir en pareja, pues según un estudio recogido en la revista “Journal of Marital and Family Therapy”, puede sincronizar las relaciones de afecto. Se puede deducir que los colchones estrechos promueven tales beneficios al favorecer la unión, pero la apreciación tiene sus matices.
Y es que si los miembros de la pareja son corpulentos y/o se mueven mucho cuando duermen, el colchón estrecho será contraproducente, no favorecerá el descanso y, por lo tanto, acabará mermando la calidad de vida.
Colchones estrechos, anchos o separados, ¿cómo afecta?
Los colchones estrechos favorecen la conexión de la pareja, que permanecerá más unida físicamente. Es ideal para quienes gustan de acurrucarse y sentir en todo momento la proximidad de la otra persona, una sensación con la que no todo el mundo está cómodo.
Hablamos de una medida inferior a la habitual de 135 cm, pero que no debería estar por debajo de los 120 cm. Es más, esta última es aconsejable cuando ambos tengan una complexión delgada, no se suelan mover y no sean especialmente calurosos. Si no es así, el descanso se verá obstaculizado.
En el otro extremo podemos encontrar a las parejas que duermen separadas por completo, en camas diferentes. En inglés se le llama sleep divorce y era muy habitual en otras épocas pero, al contrario de lo que se pueda pensar sobre sus desventajas para la relación de pareja, no todo es tan malo.
Según un estudio de Better Sleep Council, una de cada diez parejas estadounidenses duerme en habitaciones diferentes, lo que favorece la calidad de sueño e incluso (sorpresa) incrementa las relaciones sexuales. Y es que los ronquidos o un movimiento excesivo pueden ser potenciales perturbadores del sueño, por lo que se ve como una solución rápida y efectiva.
En un punto medio estarían los colchones con independencia de lechos, donde destacan los compuestos por un núcleo de muelles y acolchados de viscoelástica o látex.
Elegir bien sí que mejora la relación
De todo lo anterior se desprende algo evidente: lo mejor para la relación de pareja es elegir bien. Un buen descanso es fundamental para la calidad de vida, porque el estrés o el cansancio que se derivan de lo contrario pueden afectar en todas esferas del día a día, también a la relación.
Es aconsejable que aquel miembro de la pareja que tenga más problemas para conciliar el sueño sea quien elija, y que solo se opte por colchones estrechos, anchos o camas separadas cuando se sopesen bien las ventajas y desventajas.
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